jueves, 3 de septiembre de 2009

La extorsión

A los once años tenía un diario personal. Bah, era un cuaderno donde describía todo lo que no entendía del mundo y cómo quería ser. Era bastante pretencioso y aburrido (y confuso porque generalmente escribía después de llorar), pero era uno de mis tesoros.
Un día lo llevé a la escuela, no sé muy bien por qué. Tal como en una mala película yanqui, se me cayó de la mochila y lo agarró Alejandro, el más miserable de mis compañeros de grado. Y uno de los más burros.
El pichón de matón de barrio, hizo la amenaza obvia:
Matón
“Si no me dejás copiar en todos los exámenes hasta fin de año (era un delincuente con visión de futuro), le leo a todo el mundo tu diario”.

Un rápido repaso mental me recordó que algo había escrito del chico que me gustaba, pero fundamentalmente, tenía conciencia de lo ridículas que eran algunas anotaciones. ¡Yo tenía una reputación de chica fuerte que sostener!

Matón
“O si no, mejor, se lo muestro a todo el mundo y después lo rompo…”
Y justo en ese momento tuve una revelación:

Moni
“No me importa. Por mí, hacé lo que quieras. Yo no te voy a dejar copiar. Y otra cosa: para leérselo a todos, tendrías que saber”. *

Porque él sería un matón con visión de futuro, pero yo ya había aprendido de las películas que si te dejás extorsionar una vez, después terminás teniendo que robar un banco o algo peor.

Salí del patio caminando rápido con el cuaderno, que le saqué de las manos casi sin esfuerzo, creo que por el asombro.

*Nunca supe cómo logro que no me peguen. En ese momento quizás fuera porque medía 10 cm más que el matón.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

jajaja que bien que estuviste! lo dejaste al maton con la boca abierta!
muy bueno
un beso

Moni dijo...

Gracias Ana!
Hace poco, dudando de mí, me acordé de esa escena y me sentí mejor.
Si me banqué un apriete a los 11, también me lo puedo bancar ahora.

Nati Alabel dijo...

Waw! admirable! aplaudo a la niña valiente! Yo era bastante más cagona...

Moni dijo...

Ojo, yo en general tampoco soy tan valiente, eh.
Saldos, Natalia. Gracias por pasar!

Agustina Martínez Alcorta dijo...

Hola! me encantó la anécdota, esas estrategias son necesarias en el primario porque los chicos son muy crueles a esa edad. Yo tenía un compañero que me volvía loca, y me ponía muy mal, cuando le conté a mi mamá (bien de nenita) me dijo que le dijera "forro pinchado".
Obviamente yo no tenía la menor idea de qué significaba pero repetí tal como ella lo dijo y el pibe se quedó con la boca abierta. Nunca más me molestó!
Saludos!
PD: Cuál es tu fecha de nacimiento?

Moni dijo...

Agus:
Bien por tu mamá! A la mía no se le hubiera ocurrido.
Saludos y gracias por pasar.
PD: 27/9